Disfruta del ahora.

¿Nunca te has sentado y has esperado a ver la puesta de sol? ¿Nunca has hecho lo contrario a lo que te han dicho? ¿Nunca has roto alguna regla? ¿Nunca has tenido esas ganas de comerte el mundo? Levantarte de un salto y sonreirle a todo el mundo cuando vas por la calle. Llegar al instituto y que todo el mundo se de cuenta de que has llegado y se giren para verte, a ti te da igual. Lo que importa es lo que realmente son ¿no es así? De todo estoy pensando ahora, que todo lo que queremos tenemos que hacerlo. Porque puede llegar el momento en el que no puedas hacerlo y entonces sí que lo deseas con todas tus ganas. Da pena de que llegue ese momento y no hayas disfrutado de todo lo que tienes, todo aquello que te hace sentir especial. Hay que vivir dándose cuenta de todos los pequeños detalles, porque son los que marcan la diferencia. Haz todo lo que quieras y sientas. No te arrepientas de haberlo hecho, no has desperdiciado tu tiempo y tampoco te vas a quedar toda la vida preguntándote que habría pasado. Simplemente se feliz con todo y así ya no serás nunca más triste.